viernes, 10 de agosto de 2007

LA FIESTA DE LA ASUNCIÓN

Respuesta
Recomendar Mensaje 450 en discusión
De: Galilea7771



¿NOS CONSAGRAMOS A MARIA?

La fiesta de la Asunción

Imitemos su docilidad al Espíritu Santo

Pbro. José Martínez Colín

1) Para saber

Cada 15 de agosto la Iglesia celebra alegremente una fiesta de la Santísima Virgen María: su Asunción a los Cielos. En el ejemplo de María encontramos el camino para subir también al Cielo.

Si queremos imitarla hemos de seguir de ser dóciles a las inspiraciones de Dios. Esto me recuerda lo que sucedió con un boxeador.

Al terminar una gran pelea de box por un campeonato mundial, el entrevistador, se acercó y le pidió unas palabras para el público. El ganador sólo dijo: “Todo se lo debo a mi entrenador”.

Y tenía mucha razón, pues si no fuera por él, nunca hubiera ganado. Si el discípulo sigue fielmente las instrucciones y el entrenador sabe su oficio, es muy probable que se consigan muchos éxitos.

En la vida espiritual sucede algo muy parecido. Nos entrenamos para llegar a la vida eterna y necesitamos también un buen “entrenador”. El mejor “entrenador” que hay es el Espíritu Santo, pues Él conoce mejor que nadie a nosotros y el camino que lleva al cielo.

  1. Para pensar

La Santísima Virgen María, ha sido la persona más dócil al Espíritu Santo. Además de que Dios la colmó de su gracia, Ella cooperó con una docilidad excepcional viviendo con heroísmo la fidelidad en los pequeños deberes de todos los días y en las pruebas grandes.

El alma de la Virgen María fue enriquecida con los dones del Espíritu Santo. Por eso a la Virgen María se le llama “Casa de Oro”, pues fue revestida de una hermosura tan grande que otra mayor no fue posible.

En la respuesta de la Virgen ante el anuncio del Arcángel San Gabriel, podemos descubrir los siete Dones del Espíritu Santo. Veamos:

  • Su inteligencia fue iluminada y siguió el Don del Consejo al aceptar la voluntad de Dios para ser Madre del Salvador.
  • Comprendió, ayudada por el Don de Ciencia, que todos los acontecimientos de su vida -sus padres, su casamiento con San José, su deseo de permanecer virgen, etc.- eran para cumplir su vocación divina.
  • Al aceptar ser Madre de Cristo comprendió perfectamente, al tener el Don de Entendimiento, que su hijo sería el Mesías esperado por siglos y, por tanto, las consecuencias que traería: por ejemplo, que su virginidad era agradable a Dios, pues así se cumplía, la profecía: “He aquí que la Virgen concebirá y dará a luz un hijo” (Is. 7,14).
  • También aceptó el gran dolor para soportar los sufrimientos de su Hijo, gracias al Don de Fortaleza.
  • María, con el Don de Piedad, se sintió siempre muy Hija de Dios, aceptando su voluntad sintiéndose “la Esclava del Señor”.
  • Manifestó una profunda reverencia filial que el Don de Temor de Dios le inspiró.
  • Por último, el Don de Sabiduría perfeccionó en la Virgen la virtud de la caridad y la llevó a conocer y gustar de los misterios salvíficos.

Pensemos si nuestra respuesta diaria a lo que Dios nos pide va acompañado de esa docilidad que observamos en María.

3) Para vivir

La Santísima Virgen María nos enseña a aceptar con humildad el plan que Dios tiene para nosotros. Podremos conocerlo al tratar al Espíritu Santo, al platicar con Él, frecuentando los sacramentos, rezando cada día, cumpliendo nuestros deberes por amor a Él.

Manifestémosle frecuentemente, y sin miedo, nuestra disposición para hacer su voluntad; Él se encargará de hacérnosla saber claramente.

(Comentarios: padrejosearticulos@gmail.com)

No hay comentarios:

Datos personales

En mi pueblo Almodóvar del Campo, nacieron dos grandes santos, San Juan de Avila y San Juan Bautista (Reformador de los Trinitarios) y allí se celebraron los tres primeros capitulos de la reforma Teresiano-Sanjuanista, son mis cuatro pilares donde me apoyo para evangelizar. Por otra parte, Mi padre me hizo prometer que siempre miraría por Puertollano y continuaría con su trabajo...